Cada día que pasa es más común encontrar un filtro para ducha en las viviendas. Estos se han convertido en herramientas imprescindibles para garantizar la buena calidad del agua y evitar los problemas de salud asociados a contaminantes o químicos propios de las plantas de tratamiento.
No obstante, todavía puede haber muchas dudas respecto de si es realmente importante su incorporación y qué beneficios puede llegar a implicar. Por eso, a continuación, vamos a contarte acerca de las principales razones para tener un filtro para ducha en casa y por qué deberías incorporarlo también.
Motivos para tener un filtro para ducha
Ciertamente, podemos decir que la razón fundamental para tener un filtro para ducha en la casa tiene que ver con poder acceder a agua más limpia a la hora de bañarse. Sin embargo, es necesario conocer por qué esto es importante y qué beneficios extra aporta este tipo de dispositivos. Aquí lo respondemos.
La mayor parte del agua de red posee químicos
Pese a que es de público conocimiento lo saludable que el consumo de agua es para las personas, lo cierto es que el agua que llega a la mayor parte de las viviendas en las distintas ciudades del mundo, en los grifos tanto de la cocina como del baño y la ducha, está repleta de productos químicos. Uno de los más destacados es el cloro, para el que existen distintos estudios que dan cuenta de sus consecuencias sobre la piel y la salud de las personas.
Además de esto, el agua que llega a las viviendas puede contener hongos y bacterias que son perjudiciales para la piel si se tiene contacto con ellos, especialmente cuando es un contacto frecuente como es el caso de la ducha. En ambos casos, el filtro para ducha se encarga de retener y evitar que estos químicos y bacterias lleguen a las personas, logrando que el agua que estas utilicen sea más saludable y purificada.
La piel es sensible al cloro
La piel es el órgano más extenso en el cuerpo humano, encargándose de cubrir la totalidad del organismo. Por eso, su cuidado es indispensable. Si bien es verdad que el cloro es muy eficaz para matar patógenos en el agua, lo cierto es que también es absorbido por la piel, afectando su microbioma y el equilibrio necesario de las bacterias de la piel.
Algo que han demostrado los estudios es que los seres humanos somos capaces de absorber mayores cantidades de cloro a través de la ducha que incluso bebiendo agua de red. Esto tiene que ver con que las duchas suelen darse a temperaturas cálidas que favorecen la absorción de cloro, a la vez que el agua está en contacto con superficies muy extensas del cuerpo durante la ducha. Por eso, el filtro para ducha en casa es importante para evitar las reacciones alérgicas, la sensibilidad y la resequedad que el cloro puede ocasionar en la piel, así como también para prevenir que este se absorba y pase al torrente sanguíneo.
El cloro además, es capaz de interactuar con otras materias presentes en el agua. Cuando esto pasa, forma subproductos que son especialmente dañinos para las personas. Entre ellos, encontramos los trihalometanos o THM, como es el caso del cloroformo.
Los químicos pueden aumentar las posibilidades de aparición de cáncer
No todos los efectos del contacto de los químicos con la piel son estéticos o notorios. El uso permanente de agua con estos componentes puede promover el desarrollo de enfermedades como el cáncer y otros problemas de salud graves. Si bien es cierto que muchos de estos están relacionados con el consumo de agua sin purificar como bebida, lo cierto es que también puede ocurrir por el contacto de estos químicos con la piel o con la inhalación de estos en el aire, como hemos visto anteriormente.
Si hablamos de los químicos presentes en el agua, muchos de ellos han sido relacionados a variados tipos de cánceres. Investigaciones orientadas a los efectos del agua clorada sobre la salud de las personas han dado cuenta de muchos problemas de toxicidad. Diversos estudios han demostrado que las comunidades que utilizan efectivamente agua clorada tienen un mayor riesgo de padecer cáncer, siendo los más frecuentes el cáncer de riñón, el cáncer de vejiga y el cáncer de recto.
Junto con esto, es importante mencionar que los THM del agua que es tratada químicamente en las plantas potabilizadoras o de limpieza de la misma, han sido asociados a muchos resultados variados de partos deficientes o problemas durante el embarazo. Aquí se han encontrado, además, problemas de bajo peso al nacer, defectos de nacimiento o abortos espontáneos.
Los químicos del agua alteran el microbioma de la piel
Cuando se emplea el término microbioma, se tiende a pensar que se trata de algo solamente relacionado con el intestino de las personas. Sin embargo, la piel también posee microbioma, el cual es una especie de manto de microorganismos que se encargan de proteger la piel de infecciones y de agresiones que puedan venir del exterior.
Al encontrarse en permanente contacto con productos químicos sanitizantes del agua, como es el caso de la ducha, tanto el cloro como el resto de ellos pueden producir grandes alteraciones en el microbioma de la piel. Esto, después impacta en que esta (la piel) pierda humectación, se reseque, esté propensa a sufrir de enrojecimientos y sarpullidos y, además, en que sea menos resistente. En efecto, se debilita la capa protectora de la piel.
Además de esto, es importante mencionar que muchos de los efectos de los químicos en el microbioma de la piel pueden no ser visibles de forma inicial, sino que se pueden ir experimentando con el paso del tiempo. Esto genera que las expresiones sobre sus efectos sean tardías, llevando a que las consecuencias puedan adquirir mayor gravedad. Ten presente que cuando la piel está en contacto permanente con el cloro, también se pueden dar episodios de acné o empeorar en las personas que ya lo padecen.
El aire caliente favorece la inhalación de los químicos
Aunque hemos dicho previamente que el cloro en el agua afecta la salud de la piel por su contacto y puede afectar también al organismo por la posibilidad de ser absorbido, este no es el único problema. Además, al hacer duchas con agua caliente, el aire y agua a temperaturas más altas promueven la apertura de los pulmones. Esto también facilita que los químicos en el agua sean inhalados. Tanto es así que hay estudios que han descubierto concentraciones de cloroformo más altas en los pulmones de personas que realizan duchas de agua caliente sin dispositivos de filtración.
Pero el riesgo no es solamente para la persona que está llevando a cabo esa ducha. Además, el agua caliente libera sustancias químicas que se pueden distribuir fácilmente a lo largo del hogar, a la vez que son difíciles de disipar en espacios como el baño. Por eso, las personas pueden estar en contacto con ellos tanto durante la ducha como después, exponiendo a todos los miembros de la familia.
Así, los productos químicos en la ducha pueden evaporarse con el agua caliente y liberarse en el aire en cantidades más altas aún que en el agua en sí misma. Estudios de EPA (Agencia de Protección Ambiental) han encontrado importantes niveles de THM y otros subproductos del cloro en el aire.
El agua con químicos aumenta las posibilidades de desarrollar asma
Por último, los vapores del cloro como consecuencia de las duchas calientes han sido asociados por especialistas con un riesgo aumentado de desarrollar asma o de sufrir episodios de esta en los casos en los que la enfermedad ya existe. Se trata de vapores a través de los cuales los químicos ingresan de forma directa a las vías respiratorias, generando distintas repercusiones de acuerdo al caso.
Además del asma, es importante mencionar que el agua clorada contiene radicales libres. Según investigaciones, estos han sido directamente relacionados con un empeoramiento en el funcionamiento del hígado, incluyendo cambios pre-arterioscleróticos en las arterias y también un debilitamiento y mal funcionamiento del sistema inmunitario en general, con las repercusiones que esto representa en la capacidad del cuerpo de protegerse de infecciones y enfermedades.
Conclusión
Como puedes darte cuenta, son muchos los motivos por los cuales es importante implementar filtros de ducha en tu hogar. Esto te brindará la tranquilidad de que tú y tu familia estarán protegidos contra los químicos tóxicos que el agua que viene de las tuberías contiene. ¡Es sin duda una inversión que beneficiará a quienes más amas!
En Sanaté contamos con filtros de excelente calidad que están fabricados con los medios de filtración más avanzados, reduciendo sustancialmente los sedimentos, químicos tóxicos y minerales duros en el agua que afectan la piel, las uñas, el cabello y hasta el sistema respiratorio. Son filtros con 14 capas de filtración que permiten disfrutar de un agua en su estado más natural. ¡Contáctanos! y entérate de todo sobre nuestros productos y sus beneficios para tu hogar.